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A comienzos de año se lanzó la convocatoria dirigida a líderes escolares latinoamericanos para cursar el Diplomado Liderazgo para el cambio y la mejora educativa: nuevas perspectivas y herramientas para equipos directivos en América Latina, que busca contribuir al desarrollo y fortalecimiento de capacidades de liderazgo escolar, mediante un intercambio de experiencias latinoamericanas que permitan ampliar perspectivas y conocer nuevas herramientas para liderar la mejora continua en los centros educativos. 

Fue así como Red Educativa La Salle Bogotá acudió a este llamado, motivada por la posibilidad de desarrollar y fortalecer estas capacidades. En la Red trabajan con 20 obras (como las denominan ellos) educativas distribuidas así: 7 obras educativas privadas, 1 escuela primaria privada que beca a niños con dificultades económicas, 10 obras educativas públicas y 2 centros de educación superior, uno público y otro privado. 

En el diplomado participan 38 personas, que corresponden a duplas por cada escuela, junto con un par de personas de la Universidad La Salle. 

Aunque las clases comenzaron recientemente -7 de mayo y se extenderán por 6 meses-, para conocer más de cerca cómo ha sido la experiencia, conversamos con dos directivos: el Hermano Diego Díaz, Visitador Provincial de la Congregación; y el Hermano César Carvajal, Secretario de Educación de la Red Educativa La Salle. 

¿Qué necesidad percibieron en la Red Educativa que les llevó a tomar esta formación que ofrece el Diplomado?

Hno. Diego: En primer lugar, la necesidad parte en dar continuidad al trabajo que iniciamos el año pasado con la UDP en una primera fase o nivel. Entonces, es la necesidad de seguir motivando a nuestros responsables o futuros responsables del liderazgo educativo. 

En segundo lugar, considero que la realidad de cambio que vivimos a nivel social, educativo y todos estos nuevos desafíos que se nos presentan, nos llevan a formarnos y prepararnos para poder responder con pertinencia a los retos educativos que tenemos hoy. Especialmente, desde el liderazgo y la innovación. 

Es también entender los cambios que se están presentando en la vida del ser humano y que tienen una gran incidencia en los temas educativos y que tenemos que reflexionar, profundizar y descubrir nuevos caminos que nos permitan responder adecuadamente a los nuevos liderazgos que hoy tenemos que tener presentes. 

Como tercer punto, es importante continuar dándole el valor al tema de la gestión educativa y lo que ello amerita, es decir, la posición que debe ocupar la labor educativa en una sociedad y en la Red Educativa Lasalle, pues eso nos motiva. Creo que ha sido muy interesante ver la motivación de los participantes, la disposición, y el gusto de participar en el Diplomado.

Hno. César: Agregaría dos puntos importantes. La capacitación, como una oportunidad para mejorar los equipos, y gestionar las instituciones. En la medida que capacitamos a los equipos y los empoderamos, el nivel de aprendizaje de los estudiantes va a mejorar significativamente. 

El segundo punto, que está en sintonía a los contextos educativos en donde están las instituciones, nos permite con este espacio formativo una lectura real de lo que viven los contextos y cómo se puede articular a la gestión educativa. Por lo tanto, si nos capacitamos y nos formamos, podemos comprender y leer las realidades y transformar las instituciones educativas.

¿Cuáles son los principales desafíos educativos actuales que les toca enfrentar con los estudiantes?

Hno. Diego: Esos desafíos que enfrentamos hoy, hacen referencia a saberlos acompañar en torno a nuevas formas que tienen que ver con la virtualidad y todo lo que ello conlleva. Allí hay un desafío, puesto que la educación no puede estar desconectada de estas nuevas posibilidades, herramientas tecnológicas, acompañamiento y todo lo que es una posibilidad para adquirir conocimiento. 

Nosotros percibimos, a nivel de Red Educativa Lasalle, que es sumamente importante atender el tema emocional. La educción emocional es un desafío para acompañar a los niños y niñas, jóvenes y a las personas en general que hacen parte de una institución o comunidad educativa. Este aspecto debe ser parte de un plan estratégico, que debe responder como tal a una atención de acompañamiento de la comunidad educativa. 

Por otro lado, y unido a lo anterior, está el tema de la familia, en el sentido de que si bien cumplimos un papel importante en la participación de los procesos educativos, pero que hoy también se convierte en un desafío porque el acompañamiento que se debe realizar a la familia, implica vincularla e identificar los procesos que vive. 

Finalmente, lo que tiene que ver con el liderazgo en sí, nos implica vernos de otra manera en el direccionamiento institucional, para realizar procesos muchos más colegiados y nos lleven a visionar la institución frente a necesidades que impacten significativamente a los estudiantes, a las familias, a los maestros y considero que, por eso el liderazgo debe permear como tal los procesos institucionales en diferentes instancias. 

Por eso este liderazgo distribuido, colegiado, que busca la participación, considero que es muy importante y, al mismo tiempo un desafío porque implica precisamente formar a los responsables para podernos gestionar de una manera diferente a la convencional o clásica de comprender los procesos educativos.

Hno. César: Además de lo emocional, agrego el tema de cómo aprenden los estudiantes, por eso la importancia de un liderazgo pedagógico, y es un desafío muy importante en este momento. Los cambios sociales, emocionales y en las familias, nos llevan a intervenirlos desde esas realidades. La apuesta de cómo aprenden los estudiantes y cómo debemos enseñar los maestros, sin duda se convierte en uno de los principales desafíos para tenerlos en cuenta. De lo contrario, todas las apuestas que mencionaba el hermano Diego anteriormente, van a quedar perdidas si no se alinean a este ejercicio de aprendizaje de los estudiantes. Lo veo más como un complemento.

¿Qué contenidos del diplomado fueron relevantes para ustedes y tomar la decisión de optar por esta formación?

Hno. César: La decisión la hicimos en función de tres aspectos. En primer lugar, cómo podíamos contribuir al desarrollo y al fortalecimiento de las capacidades a nivel de liderazgo en los equipos. Cómo podemos aportar y apoyar, eso que están viendo, a través del desarrollo de capacidades en liderazgo. Y cuáles son esas prácticas diarias o de equipo que se requieren. 

En segundo lugar, a nivel de la gestión. Cómo favorecemos experiencias y prácticas, y me refiero aquí, a cómo las podemos compartir y nos enriquecemos de los otros. Por lo tanto, el segundo objetivo de este espacio formativo, si bien tenemos capacitación y formación, se requería la socialización de esas experiencias. 

En tercer lugar, en función de la promoción o reflexión en torno a un liderazgo educativo para la justicia social, entiéndase esto último, desde características de cómo es la persona y cómo se desenvuelve en un contexto que se llama escuela o colegio, qué habilidades tiene que desarrollar en ese sentido. Digamos que esos fueron los tres grandes puntos para decirle a la Universidad Diego Portales apóyenos, acompáñenos, pero de manera especial fórmenos en estas tres realidades.

¿Cuáles han sido los principales aprendizajes durante este tiempo de formación que han tenido?

Hno. César: La experiencia ha sido positiva. La participación de los compañeros que estamos haciendo el diplomado, ha sido de alegría, agradecimiento y satisfacción por lo que hemos construido y lo que estamos haciendo. Percibo que ya hay una unión e integración de las instituciones educativas en torno a lo que estamos viviendo o a las experiencias significativas cuando se comparte lo que se hace o lo que estamos construyendo. Siento que hay un grado de aceptación, de escucha con los otros, entonces este ejercicio ha facilitado muchísimo.

En cuanto a los profesores y las personas que nos han apoyado en el espacio de formación, valoramos su conocimiento, su experiencia y su rigor académico. La verdad es que entre los compañeros compartimos que ha sido un agrado. Contar con profesores como José Weinstein, -nos ha acompañado en el último módulo-, quien nos desafía y nos lleva a estar muy agradecidos y satisfechos, porque es lo que queríamos: rigor académico, poder compartir experiencias y prácticas y que, a su vez, nos reflejen cómo lo estamos haciendo y qué debemos mejorar. Y desde luego, la motivación a seguir disponibles para seguir aprendiendo y conociendo a más profesores en torno al liderazgo.

¿Qué expectativas tienen con los participantes al finalizar esta formación?

Hno. Diego: Pienso que es continuar cualificando ese desenvolvimiento para el liderazgo y la innovación educativa. Y esa expectativa se tiene que ver reflejada en el direccionamiento de nuestras obras con mayor creatividad, compromiso y en esa medida buscando responder a las necesidades que se van presentando en la actualidad. 

Al principio, con el Hno. César cuando empezamos a trabajar en torno a este tema, hubo un poco de expectativa frente a lo que era el tema de liderazgo educativo. Algunas personas no lo vieron necesario. Pero cuando comenzamos el proceso y fortalecimos algunos aspectos de nuestra Red, nos dimos cuenta que necesitábamos cambiar nuestra visión con respecto al liderazgo educativo hoy. Por lo tanto, teníamos que incursionar en los temas de innovación educativa, de liderazgo distribuido, colaborativo y servicial para poder generar un mayor impacto positivo en los niños y niñas, jóvenes y las familias. 

Por otro lado, considero que la realidad del mundo y todo lo que tiene que ver con la educación ambiental, es un escenario y un tema tan relevante que nos implica continuar formándonos. Esta es una expectativa relevante para nuestra Red Educativa La Salle: formar estos nuevos líderes para comprender el cuidado de la naturaleza, de la creación, de la vida, de la ecología y ello implica vernos de otra manera en la gestión. Ello implica incursionar en otros aspectos que por eso el diplomado pretende fortalecer, dar herramientas, redescubrirnos, reinventarnos hoy para responder a los nuevos desafíos.

Y para finalizar, creo que la principal expectativa es que, para quienes están participando, que concluyan esta formación muy animados, con sueños, diciendo “vale la pena”, que salgan motivados a ser mejores maestros y maestras, que se den cuenta de la urgencia de contar con maestros y maestros comprometidos para poder brindarle a la sociedad y al tema educativo, personas verdaderamente con pasión, con capacidad de análisis de la realidad, para brindar lo mejor a la educación, que es lo nuestro.

Hno. César: Agradecemos de manera especial a los docentes que nos han acompañado y nos van a acompañar en esta experiencia. Fruto de que el diplomado salga bien, es que sus docentes tienen una experiencia académica y unas prácticas día a día, pero además tienen una forma de ver el mundo de una manera holística o global. Desde su experiencias permiten compartir lo que han vivido y construido, pero sobre todo la posibilidad de formar a otros para que puedan replicar y transformar las instituciones educativas. Gracias en especial a este equipo de la UDP que ha estado tan atento en la formación de los equipos líderes de la Red Educativa La Salle.

Experiencias significativas

Quisimos compartirles también cómo ha sido la experiencia de los participantes del Diplomado y esto fue lo que expresaron:

“Quisiera resaltar dos aprendizajes significativos como líder de una institución educativa. Primero, que estamos llamados a ser líderes de alta calidad, que promueven lugares seguros, buen servicio, conscientes de que estamos promoviendo una marca que tiene prestigio. En segundo lugar, el diplomado me ha dado la oportunidad de identificar el liderazgo que practica el equipo directivo en la institución que lidero, en el que se promueve y se practica un liderazgo colectivo, a través del cual se comparten experiencias, capacidades y habilidades, poniendo el foco en la mejora de los aprendizajes escolares. Tenemos aún mucho que aprender y mejorar en cuento al empoderamiento, la autonomía y la gestión de emociones” (Hna. Isabel Molina, Rectora Institución Educativa Distrital Juan Luis Londoño, de Bogotá). 

“De verdad una experiencia muy positiva. Ha sido un espacio de aprendizaje en el que estamos profundizando algunos conceptos que ya teníamos, pero también aprendiendo elementos que no los teníamos claros. La metodología que se ha trabajado, las dinámicas que se han manejado en cada sesión, incluso el trabajo que nos dejaron del módulo 1, fue una experiencia que nos dijo ‘revisemos cómo estamos funcionando’. Es ir de la teoría a la práctica de una manera muy dinámica y atractiva, y esto nos permite querer estar ahí, si el interés es seguir aprendiendo, estamos a la expectativa de cómo va a ser la nueva clase, y esto es un elemento fundamental en los procesos formativos (Enna Margarita Coronel, Coordinadora Académica de la Institución Educativa Sagrado Corazón de Jesús, de Cúcuta).

“El principal aporte ha sido toda la parte conceptual de liderazgo, ha sido un enriquecimiento en mi vida personal y profesional. Abordar esta temática desde distintas perspectivas, nos permite comprender de una u otra manera todo el contexto de las escuelas Lasallistas, de liderar no solamente procesos, sino vidas, nuevos proyectos y entendimientos. 

Normalmente nuestros procesos comunicativos han sido muy verticales y este diplomado me está permitiendo ver de manera más colegiada ese tema del liderazgo. Entonces el trabajo en equipo es la primera expectativa, junto con la comunicación, que sea asertiva, pertinente y estratégica para liderar cada uno de esos procesos. 

Estoy viendo este liderazgo desde una perspectiva como docente de aula y no tanto como directivo, pero, a su vez también, me ha permitido entender la dinámica con los demás profesores con quienes comparto la misma misión, pero también entender las indicaciones y todo el trabajo mancomunado que vamos realizando” (Hno. Sebastián Arias, Coordinador de Pastoral del Instituto Politécnico Álvaro González Santana, de Sogamoso)